Es de esas películas brillantes que engancha al espectador desde la primera escena y no lo deja hasta el final. La originalidad de esta premiada producción se extiende tanto al fondo como a las formas, sin caer nunca en extravagancias gratuitas. Aun siendo un musical, las letras de las canciones se integran perfectamente en el relato. Sus representaciones, alejadas de los conceptos clásicos, dinamizan la narración sin frivolizar con el intenso thriller que cuenta. Unas actrices en estado de gracia traspasan la pantalla y contribuyen a proyectar sus mensajes.
Sobrecualificada e infravalorada, Rita lleva tiempo ejerciendo de abogada, aunque abomina del modo en que los jueces corruptos aplican la justicia. Su vida comienza a cambiar el día que reclama sus servicios Manitas del Monte, cabecilla de un temido cártel mexicano. Le confiesa que siempre quiso ser mujer y ahora desea operarse. Ella deberá contratar al mejor cirujano, proporcionarle otra identidad y alejar a los suyos de cualquier amenaza instalándolos en Europa. En unos meses lo darán por desaparecido y se habrá convertido en Emilia Pérez. Si cumple con esos encargos, será inmensamente rica. Unos años después volverán a encontrarse.
Jacques Audiard (Un profeta, De óxido y hueso, Dheepan), inspirándose en una obra de Boris Razón, ha escrito y dirigido con maestría este premiado filme. Recurre a argumentos sólidos e inteligentes para reivindicar la reasignación de género. No se queda ahí, también denuncia con contundencia la asoladora violencia procedente del narcotráfico que azota al país norteamericano. Consigue sus propósitos desarrollando un drama familiar condicionado por unos conflictos sentimentales sobre los que penden circunstancias altamente inquietantes.
Las protagonistas recorren unos arcos dramáticos perceptibles, marcados por diversos acontecimientos que alteran sus planes y las arrastran a unas tesituras delicadas de difícil resolución. Remata los vibrantes minutos finales con un epílogo sereno y elocuente a la vez.
Transita de los ambientes empobrecidos a los espacios ostentosos; en ambos casos se suceden unas secuencias enérgicas, diseñadas y filmadas con oficio. Los números coreográficos huyen de la pomposidad y centran la atención en potenciar sus contenidos.
El reparto principal, completamente femenino y galardonado en el Festival de Cannes, está irreprochable. La española Karla Sofía Gascón supone todo un descubrimiento. Se desdobla en dos papeles diametralmente opuestos que borda por igual. Zoe Saldaña (Guardianes de la Galaxia) y Selena Gomez brillan en unos personajes muy temperamentales.
el español es un idioma de pobres
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